Cada vez son más los hogares que deciden adoptar mascotas, de manera que pensamos que es muy importante conocer cuáles son los principales beneficios terapéuticos de las mascotas, tanto para las personas sanas como para aquellas que padecen algún tipo de problema de salud.
Las mascotas: compañeros, amigos y ayudantes con muchos beneficios terapéuticos
No hay duda de que cada vez son más las personas que deciden poner una mascota en su vida, y es que los animales suponen grandes ventajas en nuestro día a día.
Podemos encontrar todo tipo de adoptantes, desde aquellos que viven solos hasta familias, personas sanas, personas dependientes, jóvenes, mayores… No hay límite a la hora de introducir en el hogar a un nuevo compañero que nos va a ayudar, se va a convertir en un buen amigo y hará de nuestra vida algo mucho más especial.
Aprovechamos para recordaros que antes de adoptar una mascota, es muy importante que aprendáis acerca de sus particularidades y sus necesidades básicas, de manera que cuando llegue a casa, hayáis pasado ya por la tienda de animales y lo tengáis todo bien equipado para garantizar su comodidad, seguridad, salud y por supuesto también su felicidad.
Principales beneficios terapéuticos de las mascotas
Vamos a centrarnos ahora en los beneficios terapéuticos de las mascotas, destacando algunos de los principales como son:
Aumenta la actividad
Una de las ventajas de adoptar una mascota es que nos va a empujar a aumentar nuestra actividad.
Las mascotas requieren de cuidados y atención, lo que significa que no sólo vamos a tener que dedicarles tiempo y jugar con ellas, pasear, etc., sino que además, también deberemos estar atentos a sus necesidades, ya sea desde darle de comer cada día hasta cambiarle el agua, comprar las cosas que necesite, etcétera.
Es una buena idea para animar a los niños a que aumenten sus responsabilidades y aprendan cosas muy interesantes y beneficiosasde su nuevo compañero.
Favorece la socialización y previene la soledad
Las mascotas también previenen la soledad, ya que no sólo son fantásticos acompañantes que hacen nuestro día a día más agradable y feliz, sino que además, también empujan a que conozcamos a otras personas.
Desde el vecino que también tiene mascotas hasta el veterinario, gente que conoceremos cuando salgamos a dar paseos, etcétera, todo ello va a favorecer la socialización de la familia.
Se desarrolla la empatía
Muy especialmente si vivimos solos, la empatía es algo que a menudo va quedando rezagada hasta pasar a ser uno de los últimos términos de nuestra personalidad, de manera que introducir una mascota en nuestras vidas, nos ayuda a compartir emociones y necesidades con otros seres vivos.
Esto es especialmente importante para que los niños desarrollen su empatía, de manera que observaremos también una sustancial mejora en su capacidad de comunicación y relación con otros niños, reduciendo también su agresividad.
Reducen el estrés, la ansiedad y la depresión
Está demostrado que las mascotas reducen de forma muy considerable los niveles de estrés.
Vivimos en una sociedad repleta de obligaciones a las que hacer frente, responsabilidades, problemas por solucionar, etcétera, lo que hace que sea prácticamente imposible que no se nos acumule el estrés semana tras semana.
Si no lo liberamos, este estrés poco a poco va a dar lugar a problemas más graves como la ansiedad y la depresión, de manera que si todavía no las hemos desarrollado, la mascota impedirá que lleguemos a ello, mientras que si nos encontramos dentro del elevado porcentaje de personas que sufre ansiedad y/o depresión, nuestra mascota nos ayudará a reducir los niveles y a recuperarnos no sólo más rápidamente, sino con mayor eficiencia.
Ayudantes especiales para terapias
Seguramente, en más de una ocasión habéis escuchado que las mascotas, sobre todo perros, gatos y caballos, son determinantes para el tratamiento de multitud de enfermedades y problemas tanto físicos como mentales.
Es por ello que cada vez hay más profesionales que se encargan de desarrollar las capacidades de estas mascotas para mejorar el estado de salud y la calidad de vida de dichos pacientes.
Esto no sólo beneficia a la persona enferma, sino que además, y tal y como comentábamos anteriormente, también va a reducir el estrés de las familias que se hacen cargo de ella.
Aumentan la motivación
También vamos a observar que nuestra motivación aumenta en poco tiempo, logrando que consigamos hacer frente a todas aquellas cosas que hemos ido dejando de lado y abandonando con el paso del tiempo.
de hecho, en la actualidad son muy habituales las terapias motivacionales donde se utilizan mascotas como perros, las cuales están especialmente dirigidas a personas de todas las edades que tienen problemas de autoestima y autoconfianza, muy especialmente dentro del grupo de edad de adolescentes.
Apoyo emocional
A día de hoy, prácticamente todos necesitamos apoyo emocional, muy especialmente si vivimos solos o padecemos problemas de depresión.
La compañía de nuestra mascota va a proporcionar una gran ventaja en este sentido, ya que consiguen subir el estado de ánimo a la vez que también motivan la práctica de ejercicio físico, siendo ambos aspectos clave para conseguir mejorar a nivel emocional.
Mejora la capacidad de responsabilidad
Esta ventaja es especialmente interesante para los niños, ya que el hecho de traer una mascota a casa y encargarles parte de sus cuidados, les ayuda a adquirir un compromiso y un mayor respeto hacia los animales.
Ayuda en la educación de los niños
Tal y como podemos observar en las muchas ventajas que hemos descrito anteriormente, las mascotas son muy educativas para los niños.
Les ayuda a trabajar en equipo, mejorar su concentración, desarrollar más su aprendizaje y a sentirse más motivados.
También se ha demostrado que son de ayuda a la hora de perder el miedo a hablar en público.
Aumentan los niveles de felicidad y mejora la calidad de vida
Como beneficio terapéutico final, podemos destacar el hecho de que en numerosos estudios demuestran que las mascotas aumentan de manera muy significativa en los niveles de felicidad de las personas con las que conviven.
Hay algunas que sacan un mayor partido que otras, pero en general, la calidad de vida de las personas que tienen mascotas suele ser superior a aquellas que no tienen o nunca han tenido anteriormente.