La contaminación de las aguas continentales es un serio problema que cada vez pone más en jaque el sostenimiento medioambiental, ya que afecta tanto a la flora como a la fauna, pudiendo llegar a desarrollar importantes problemas difíciles de solucionar. Por esa razón vamos a analizar cuáles son los principales medios por los que se suelen contaminar, así como tendremos en cuenta los sistemas de depuración natural.
Qué son las aguas continentales
Se denominan aguas continentales a todas aquellas masas de agua que tienen carácter permanente y se encuentran en las zonas continentales, incluyendo tanto las ubicadas sobre la superficie de la tierra como las aguas subterráneas.
Las aguas continentales se clasifican en dos grandes grupos:
- Aguas continentales superficiales: comprende los ríos, riachuelos, humedales, manantiales, lagos y glaciares.
- Aguas continentales subterráneas: son los acuíferos, ríos subterráneos, manantiales y fuentes.
La importancia de las aguas continentales en el medioambiente
Las aguas continentales se forman a partir de la acumulación de agua procedente de las precipitaciones, así como de diferentes fenómenos de índole natural, logrando de esta forma extender y acumular agua para su uso posterior.
Estas aguas son imprescindibles para el desarrollo del medio ambiente, tanto para la fauna como para la flora, de la misma manera que es un recurso que puede ser utilizado por el hombre siempre y cuando lo haga de manera sostenible y sin alterar la naturaleza de las aguas y su entorno.
Sin las aguas continentales, tanto la flora como la fauna desaparecerían, afectando muy negativamente la vida en la Tierra.
Principales indicadores de la contaminación de las aguas continentales
Observar los indicadores de la contaminación de las aguas continentales puede ser determinante para poder detectar cualquier foco de contaminación para corregirlo lo antes posible.
Para ello generalmente se estudia el estado de animales, plantas y algas, lo que facilita detectar si hay algo en el medio acuático que esté afectando negativamente a su estado.
También se miden los niveles de oxígeno, los cuales permiten detectar contaminación por materia orgánica, ya que en las zonas donde los niveles de oxígeno son bajos, las bacterias pierden su capacidad para descomponer la materia orgánica, lo que significa que los niveles de contaminación del agua aumentan de manera muy significativa.
Medios de contaminación de las aguas continentales más habituales
Vamos a proceder a analizar cuáles son los principales medios de contaminación de las aguas continentales:
Fugas de sistemas de saneamiento
Las fugas que se producen en los sistemas de saneamiento, pueden llegar a ser muy contaminantes si alcanzan aguas continentales, razón por la cual es importante detectar cualquier tipo de fuga para proceder a su reparación lo antes posible.
Muy a menudo, la contaminación de algunos lagos y ríos se produce precisamente por sistemas de saneamiento defectuoso, lo que hace que sea más complicado poder detectar la razón por la que los niveles de contaminación aumentan.
Vertido de aguas residuales urbanas
Aunque cada vez son más los países que sancionan comportamientos como es el vertido de aguas residuales, lo cierto es que todavía sigue siendo un serio problema en la actualidad.
Estas aguas residuales entran con una concentración de contaminación muy elevada que los sistemas de depuración natural no consiguen recuperar, lo que hace que cada vez los niveles de contaminantes aumenten.
Vertederos con mal aislamiento
Algunos vertederos con un mal aislamiento pueden llegar a contaminar aguas continentales.
Esto se produce principalmente cuando los vertidos se encuentran sobre la tierra, de manera que en el momento en el que llueve, parte de estos restos se van filtrando a la propia tierra, pudiendo llegar a alcanzar aguas subterráneas y acuíferos, los cuales contaminará de forma directa, mientras que estos también pueden trasladar la contaminación a otros tipos de aguas continentales.
Fertilizantes agrícolas
Los fertilizantes agrícolas son un serio problema para el equilibrio natural de las aguas continentales.
Actualmente, los países occidentales prohíben el uso de productos que puedan resultar muy dañinos a este respecto, pero lo cierto es que todavía no se ha conseguido controlar de forma eficiente el problema de los vertidos de fertilizantes agrícolas, por lo que es una asignatura pendiente que es importante corregir para reducir los problemas de contaminación.
Vertidos de explotaciones ganaderas
También se están haciendo ímprobos esfuerzos por acabar con los vertidos de explotaciones ganaderas, pero de igual manera, el control es bastante complejo.
Estos vertidos no sólo se realizan en ocasiones directamente en aguas continentales, sino que al igual que ocurre con los vertederos con mal aislamiento, son absorbidos por la tierra y transportados mediante acuíferos y ríos subterráneos.
Vertidos industriales
Los vertidos industriales han venido siendo uno de los problemas más importantes en materia de contaminación del agua.
Actualmente se lleva a cabo un control bastante efectivo para prevenir este tipo de prácticas, no sólo con el objetivo de evitar los vertidos industriales directamente, sino también para impedir que los vertidos peligrosos acaben en la alcantarilla o en zonas naturales, lo que previene que puedan acabar transportados a aguas continentales.
Algunos productos industriales que se utilizan en la actualidad pueden ser muy contaminantes, como ocurre en la industria de la metalurgia, industria del petróleo, industria química, industria farmacéutica y en las industrias del papel.
Esta es la de las principales razones por las que este tipo de industrias procedentes de países desarrollados, se instalan en países subdesarrollados ya que existe un menor control medioambiental, a lo cual hay que sumar que interesa a nivel político para reducir los niveles de contaminación en los países más desarrollados.
Explotaciones mineras
Las explotaciones mineras pueden llegar a ser muy contaminantes, ya que vierten grandes cantidades de compuestos que pueden afectar seriamente a la vida en el agua.
Esto ocurre especialmente con las explotaciones mineras de metal.
Contaminación de embarcaciones a motor
Los hidrocarburos y la agitación del agua afectan negativamente al equilibrio y contaminación del agua, actuando de manera muy negativa sobre el plancton.
Construcción de presas y sistemas de retención de aguas
Cuando se modifican los cursos naturales de las aguas continentales, automáticamente se está alterando el medio acuático, lo cual puede llegar a tener un serio impacto medioambiental.
Contaminación de acuíferos y aguas subterráneas
También hay que tener en cuenta que existen muchas formas de contaminación de acuíferos y aguas subterráneas, generalmente producidas por la filtración de contaminantes a través de la tierra.
Los sistemas de depuración natural para combatir la contaminación de las aguas continentales
Es importante tener en cuenta que la naturaleza crea sus propios sistemas de depuración naturales, gracias a lo cual se consigue combatir en buena parte la contaminación de las aguas continentales.
Sin embargo, al contaminar de una manera tan acelerada y con un volumen tan alto, lo que ocurre es que la propia naturaleza pierde la capacidad para poder depurar por completo las aguas contaminadas, afectando así de manera muy significativa al medio.
Hay que tener en cuenta que esta contaminación se va acumulando cada vez más, llegando a un punto en el que cada vez es más complicado luchar contra ella debido a que se supera la capacidad de autodepuración del medio acuático, de manera que es importante que se establezcan políticas que permitan proteger uno de los bienes naturales más elementales y básicos a la vez que necesarios que tenemos a nuestra disposición.
Los principales sistemas de depuración natural de las aguas continentales se basan en microorganismos, donde destacan las bacterias descomponedoras.
Su misión es básicamente la de transformar los restos orgánicos que caen al agua en materia mineral sencilla.
De esta manera, estos materiales se pueden disolver fácilmente, y los que son más densos, se precipitan en el fondo, gracias a lo cual el agua vuelve a estar transparente, limpia y sobre todo libre de dicha contaminación.