Los platos de ducha de obra son una tendencia que crece incesante en el mercado, ya que se trata de una alternativa que ofrece numerosas ventajas con respecto a otras opciones como los platos tradicionales o las bañeras, de manera que en esta ocasión vamos a hablar de este tipo de duchas de obra para analizar sus particularidades y las razones por las que os recomiendo que optéis por ellas, tanto si estáis realizando reformas como si se trata de obra nueva.
Qué son los platos de ducha de obra
Antes de nada es importante definir qué son los platos de ducha de obra, y en este sentido estamos hablando de un tipo de ducha que se diseña y construye in situ, es decir, se integra dentro de la obra del propio baño, formando una parte integral de la instalación.
Para que lo entiendas, se trata de duchas que no se pueden desmontar o mover ya que no están compuestas por elementos diferentes a la propia obra, ya día de hoy es una de las alternativas favoritas para aquellos que quieren diseñar baños modernos con ducha.
Al realizarse mediante obra, estos platos ofrecen una gran polivalencia tanto a la hora de diseñar las formas como en relación con los materiales que podemos utilizar, lo que favorece la posibilidad de crear diseños completamente exclusivos y únicos, a lo cual añadimos que también es una solución perfecta puesto que permite aprovechar hasta el último milímetro de espacio disponible.
Eso sí, para su construcción es necesario contar con una empresa especializada y que nos pueda garantizar los resultados.
Tipos de platos de ducha de obra
Existen diferentes tipos de platos de ducha de obra, los cuales se pueden clasificar de diferentes maneras en función del tipo de instalación, su forma o algunas de sus características más importantes.
Entre los principales tipos de platos de ducha de obra podemos destacar los siguientes:
- En función del material: los platos de ducha de obra se pueden construir con diferentes materiales que incluyen desde el microcemento hasta diferentes tipos de piedra como el mármol.
- En función de la forma: al tratarse de un tipo de ducha que se construye mediante obra, se adapta perfectamente a cualquier espacio aprovechando cada centímetro. Además, también ofrece la posibilidad de crear diferentes diseños con formas básicas como el cuadrado o el rectángulo, modelos esquineros, redondeados y prácticamente con cualquier otro diseño que podamos imaginar.
- En función del sistema de cierre: los platos de ducha de obra no precisan obligatoriamente de la instalación de una mampara, por lo que podemos dejarlos abiertos, construir un muro en cualquiera de sus lados o por supuesto también podemos colocar mamparas transparentes, opacas o con diferentes diseños, y con sistemas de apertura distintos, ya sea abatible o deslizante.
- En función del sistema de ducha: de igual manera, también vamos a poder encontrar diferentes alternativas que van desde la clásica alcachofa, hasta sistemas de hidromasaje para una ducha más placentera.
Los materiales más utilizados
Al realizarse mediante obra, una ventaja que vamos a disfrutar en los platos de ducha de obra es el hecho de poder realizarlos con prácticamente cualquier tipo de material que queramos, gracias a lo cual vamos a modificar especialmente su apariencia en base a nuestros gustos o al estilo decorativo del cuarto de baño.
Lo verdaderamente importante en estos casos es garantizar un perfecto aislamiento, ya que no estamos hablando de un plato de ducha que ha sido conformado previamente con materiales que aíslan de manera hidrófuga, por lo que durante su construcción hay que prestar mucha atención y garantizar el aislamiento a lo largo de toda la superficie y, muy especialmente, en la zona del desague ducha, de manera que no existan pérdidas que puedan ir calando en el forjado.
Principalmente podemos hablar de tres tipos de revestimientos para platos de ducha de obra que son:
- Revestimiento de hormigón: ofrece un estilo moderno y aséptico.
- Revestimiento de madera: también existen tarimas especiales con las que podemos crear un entorno más rústico y natural.
- Revestimiento de piedra: permite utilizar diferentes revestimientos naturales, lo que crea un aspecto más tradicional.
- Revestimiento de azulejo: otra opción es utilizar azulejos para revestir toda su superficie, lo que permite crear mosaicos muy interesantes.
Aspectos a tener en cuenta en la instalación de platos de ducha de obra
A la hora de instalar un plato de ducha de obra, es muy importante que tengas en cuenta una serie de recomendaciones como las que vamos a detallar a continuación:
- Desnivel: el plato se deberá instalar con un desnivel suficiente para evacuar el agua y evitar acumulaciones. Para ello se deberá dar al menos un 2% de inclinación.
- Aislamiento: al tratarse de un tipo de plato fabricado in situ, es muy importante garantizar el aislamiento, impidiendo así que se puedan producir fugas de agua que pueden llegar a afectar muy negativamente al forjado, a la tabiquería y cerramientos, los elementos del entorno y por supuesto también a nivel de salud.
- Sumidero: es el lugar por el que se realiza el desagüe, el cual debe estar muy bien aislado y cumplir con la Normativa para garantizar que no se producen lesiones. Recuerda que el desnivel debe apuntar siempre al sumidero. En la actualidad tenemos la posibilidad de elegir entre diferentes tipos de sumidero con distintos acabados como son:
- Sumidero cuadrado: es un tipo de sumidero más tradicional, que se amolda perfectamente al diseño y que se puede presentar en diferentes colores y formatos.
- Sumidero rectangular: es un tipo de desagüe moderno que aporta una gran elegancia y estilo, además de que es muy eficiente, cómodo y pasa más desapercibido.
Ventajas de este tipo de plato frente a otras alternativas
Los platos de ducha de obra ofrecen importantes ventajas con respecto a otras alternativas como son los platos de ducha prefabricados o las bañeras, de manera que vamos a destacar algunos de los principales:
- Durabilidad: los platos de ducha de obra son robustos y duraderos. Están diseñados para resistir el desgaste diario y no se dañan fácilmente con el tiempo.
- Personalización: puedes personalizar completamente el diseño del plato de ducha de obra. Esto incluye la elección de materiales, colores, formas y tamaños que se adapten a tus preferencias y al estilo de tu baño.
- Estanqueidad y resistencia al agua: cuando se instalan y sellan adecuadamente, los platos de ducha de obra son impermeables y evitan filtraciones de agua. Esto ayuda a prevenir problemas de humedad, moho y daños estructurales.
- Fácil limpieza: la superficie es fácil de limpiar y mantener, ya que no requiere de un cuidado especial y es resistente a manchas y productos de limpieza habituales.
- Accesibilidad: los platos de ducha de obra a ras de suelo ofrecen un acceso más fácil y seguro en comparación con las duchas con bordes elevados. Esto los hace ideales para personas con movilidad reducida o discapacidades.
- Diseño minimalista: pueden crear un aspecto minimalista y moderno en el baño, ya que eliminan la necesidad de mamparas o cortinas de ducha.
- Aumento del valor de la propiedad: la instalación de un plato de ducha de obra de alta calidad puede aumentar el valor de tu propiedad, ya que se considera una mejora en el baño.
- Resistencia a productos químicos: los materiales utilizados en los platos de ducha de obra suelen ser resistentes a productos químicos y productos de limpieza, lo que prolonga su vida útil.
- Variedad de acabados: puedes elegir entre una amplia gama de acabados, desde azulejos de cerámica hasta piedra natural, madera u hormigón lo que te permite lograr el aspecto deseado en tu baño.
- Adaptabilidad al espacio: se pueden adaptar a espacios pequeños o irregulares, lo que los hace versátiles en términos de diseño y ubicación.
- Apariencia: en comparación con la bañera y los platos de ducha elevados, conseguirás una mayor sensación de espacio.