Los cargadores para vehículos eléctricos son accesorios que cada vez están más en nuestros hogares y carreteras, ya que el coche eléctrico se está empezando a extender de manera significativa, lo que significa que es importante que empecemos a conocer todas las particularidades y el funcionamiento de estos sistemas, así como las posibilidades que tenemos en materia de instalación cargadores eléctricos.
Qué son los cargadores para vehículos eléctricos
Los cargadores para vehículos eléctricos, también conocidos como Wallbox, son dispositivos que tienen como objetivo cargar las baterías de los vehículos que funcionan con electricidad.
Que hace falta para cargar un vehículo eléctrico
Para realizar la carga de un vehículo eléctrico, tan sólo hacen falta dos elementos que son:
- Cable: es imprescindible para conectar el vehículo al punto de recarga. En este sentido, hay cargadores que llevan su propio cable, pero siempre debemos llevar un cable en nuestro vehículo para los casos en los que no sea así. En la mayor parte de casos, el equipamiento básico del vehículo incluye un conector doméstico, por lo que es posible que queramos adquirir un cable de carga rápida para poder aprovechar la máxima velocidad del punto de recarga. Estos cables tienen un precio que va desde los 300 € y hasta los 450 € normalmente.
- Cargador eléctrico: se trata del punto de recarga, el cual puede ser de diferentes modelos y se puede encontrar en la calle, en electrolineras, en algunos centros comerciales y empresas y por supuesto también se puede instalar en el hogar.
Tipos de conectores para recargar el coche eléctrico
Vamos a enumerar los cuatro tipos de conectores que pueden utilizar los cargadores para vehículos eléctricos:
- Tipo 1 o Yazaki: es un cargador que se utiliza en Estados Unidos y Japón, pero que en Europa está en desuso.
- Tipo 2 o Mennekes: este cargador es de instalación obligatoria en los nuevos modelos eléctricos en Europa. Diseñado para vehículos que permiten cargas de hasta un máximo de 43 kW (modo 3 de recarga).
- Combo 2 o CCS: permite realizar recargas por encima de los 43 kW (modo 4 de recarga). Básicamente se trata de un conector Mennekes con dos bornes extra que da lugar al conector CCS.
- CHAdeMO: es el anterior cargador rápido para cargar por encima de 43 kW, el cual está en desuso en Europa.
Para resumir, los vehículos urbanos menos potentes llevarán un cargador Tipo 2 o Mennekes para cargas de hasta 43 kW, mientras que para los más potentes se instala el cargador Combo 2 o CCS, que básicamente es un Mennekes con dos bornes adicionales y permite cargas por encima de los 43 kW.
Con qué frecuencia se recomienda cargar las baterías del coche eléctrico
Al tratarse de un coche eléctrico, viene dotado con baterías, las cuales debemos cuidar adecuadamente si queremos aumentar al máximo su vida útil.
Hay que tener en cuenta que, con el paso del tiempo y el uso, las baterías poco a poco va perdiendo capacidad, lo que significa que la autonomía de nuestro vehículo se irá reduciendo conforme se vayan desgastando.
De hecho, debemos recordar que el cambio de baterías es bastante caro, por lo que vale la pena tener en cuenta lo que recomiendan los fabricantes en relación con la frecuencia de carga de las baterías del coche eléctrico.
Aunque no existe un acuerdo generalizado, la mayor parte de fabricantes de coches eléctricos recomiendan que carguemos las baterías todas las noches, aunque esto hay que interpretarlo más bien como un hábito que nos permitirá disponer siempre de la máxima autonomía posible.
En cuanto a la frecuencia de las cargas, no hay problema a la hora de cargar el vehículo independientemente de la carga de la batería, es decir, no tenemos que esperar a consumir un porcentaje determinado para realizar la recarga.
Las baterías que se utilizan para los vehículos eléctricos no tienen efecto memoria, lo que significa que en las podéis enchufar en cualquier momento, pero eso sí, lo que nunca se debe hacer es dejar que se descarguen por completo, ya que esto puede afectar a la vida útil, reduciéndola de manera significativa.
Por esa razón, ante la duda, es mejor excedernos en las recargas que quedarnos cortos, pero tampoco es necesario estar cargando el coche todos los días si no lo utilizamos diariamente o recorremos distancias muy cortas, pero si cada día agotamos más del 30% de la batería, entonces es recomendable realizar recargas diarias.
Dónde se pueden cargar los vehículos eléctricos
Principalmente vamos a poder cargar los vehículos eléctricos en tres lugares que son:
- Enchufe de casa: la posibilidad de cargar la batería desde un enchufe normal y corriente es real, es decir, en cualquier momento podemos enchufar nuestro coche a cualquier enchufe de casa, pero hay que tener en cuenta que no es el tipo de carga más recomendada, además de que es muy lenta y requiere de muchas horas para cargar las baterías. Sin embargo, para una urgencia puntual puede servir, además de que por norma general, la mayor parte de vehículos eléctricos en su equipamiento básico vienen equipados con un cable especial con un cajetín de control que permite enchufar el coche eléctrico al enchufe de casa. Recordad que no se debe enchufar con otros tipos de cable, ya que si no tiene cajetín de control, se pueden producir averías graves.
- Cargador de baterías en el hogar: lo ideal es instalar un cargador en el hogar, una inversión que se amortiza en poco tiempo ya que va a permitir realizar recargas semirrápidas, de manera que podremos disfrutar de la máxima autonomía cuando nos levantamos por la mañana.
- Cargador de baterías público: si no podemos realizar la recarga en casa, siempre tendremos la posibilidad de conectar el vehículo a un cargador de vehículos eléctricos público. Estos cargadores generalmente están diseñados para carga rápida e incluso para carga ultrarrápida, reduciendo así el tiempo de espera hasta que puedas volver a ponerte en marcha.
Cómo se carga un vehículo eléctrico
Realizar la carga de un vehículo eléctrico es un proceso verdaderamente sencillo, de manera que tan sólo tendremos que seguir los pasos que se indican a continuación:
- Colocamos nuestro vehículo de manera que la toma de recarga quede lo más cerca posible del cargador de baterías para vehículos eléctricos.
- Extraemos el cable del vehículo, el cual conectaremos directamente al punto de recarga. Recuerda que hay puntos de recarga que ya llevan su propio cable integrado
- Cuando el vehículo se haya cargado, tan sólo hay que desenchufar el conector del punto de recarga y volver a guardar el cable en el vehículo.
Cómo funcionan los cargadores para vehículos eléctricos
Hay que tener en cuenta que los cargadores para vehículos eléctricos así como los cables y el sistema de conexión del vehículo eléctrico están diseñados para que el usuario no tenga que calentarse la cabeza para nada.
En este sentido, incluso contamos con diferentes clavijas para garantizar que nunca enchufaremos el cable equivocado en el sistema de carga erróneo, pero vamos a ir un poco más allá para explicar de forma básica cómo funcionan estos cargadores.
El sistema de carga del vehículo está compuesto por cuatro elementos principales que son:
- Fuente de alimentación: va conectada a la unidad de control y se encarga de proporcionar electricidad al cargador.
- Unidad de control: se trata de un regulador a través del cual se realiza un control y gestión del flujo eléctrico que entra al vehículo, garantizando así la seguridad durante la carga. Protege al cargador de sobrecalentamiento, supervisa el estado de las baterías, su nivel de carga y gestiona el modo de carga para garantizar no sólo seguridad sino también un menor impacto para la batería, lo que alarga su vida útil.
- Cargador: se encarga de intermediar en la carga entre la unidad de control y la batería, transformando la corriente alterna en corriente continua.
- Batería: se trata del sistema de almacenamiento donde se guarda la energía eléctrica para que esté disponible cuando queramos utilizar el vehículo.
Tipos de recarga de baterías de vehículos eléctricos
Podemos destacar cinco tipos de recarga de baterías de vehículos eléctricos, los cuales son:
- Cargadores básicos (Modo 2 de recarga): es el tipo de cargador más básico, permitiendo una potencia eléctrica de hasta 3,7 kW, lo que significa que hacen falta unas ocho horas para cargar por completo las baterías.
- Cargadores semirápidos (Modo 3 de recarga): permite potencias de carga desde los 7,4 kW y hasta los 22 kW. La carga de la batería se realizará en un mínimo de una hora y en un máximo de tres horas dependiendo de la potencia utilizada.
- Cargadores rápidos (Modo 4 de recarga): permite cargas de hasta 50 kW, lo que significa que se puede cargar hasta el 80% de la batería en menos de media hora.
- Cargadores ultrarrápidos: en la actualidad se está desarrollando modelos que permiten cargas de incluso hasta 350 kW.
- Cargadores de recarga inductiva: el vehículo se sitúa sobre unas placas de carga, de manera que no hay que intervenir para realizar la recarga de la batería, sino que esta se hace automáticamente gracias a la fuerza repulsiva que se genera por la carga de las baterías. Consigue minimizar las pérdidas durante la carga. En la actualidad fundamentalmente es utilizado por compañías de autobuses, de manera que el vehículo se aparca en el lugar indicado dónde se encuentran las placas, con lo cual la carga comienza automáticamente.
Trucos para mantener en buenas condiciones el cargador de baterías de vehículos eléctricos
Los actuales cargadores para vehículos eléctricos están diseñados para reducir al mínimo el mantenimiento y que el usuario no se tenga que preocupar en absoluto.
Sin embargo, siempre es interesante tener en cuenta las recomendaciones siguientes para evitar averías y garantizar un adecuado funcionamiento y larga vida útil:
- Antes de utilizar el cargador por primera vez, es importante que leas atentamente las instrucciones del fabricante para aprender a utilizarlo correctamente y evitar averías por mal uso.
- Si no estás utilizando el cargador, no lo dejes enchufado.
- El polvo, la suciedad y la humedad son enemigos de lo eléctrico, lo que significa que aunque los cargadores tengan una buena estanqueidad, es recomendable que se coloquen en lugares donde no se vean afectados por estos elementos, y por supuesto los deberemos limpiar con regularidad para que estén siempre limpios.
- En el caso de que tengas algún tipo de duda acerca del funcionamiento del cargador, resuélvela a través del manual, a través de Internet o poniéndote en contacto con el fabricante.
Cómo actuar en caso de problemas en el funcionamiento del cargador
Los cargadores para vehículos eléctricos no suelen dar problemas, pero tarde o temprano nos podemos encontrar con algún funcionamiento anómalo, en cuyo caso se recomienda proceder en el siguiente orden:
- No utilizar el cargador hasta haber resuelto el problema.
- Recurrir al manual de instrucciones para ver si podemos detectar el tipo de avería y solucionarla.
- En caso negativo, contactar con el fabricante para que nos aconseje.
- Si el aparato está en garantía, contactar con la empresa instaladora para que lo resuelva.
- En caso necesario, se deberá proceder a sustituir el cargador.